A través de la ONG REMAR miles de niños en países con poblaciones en alto riesgo a causa de la pobreza, el abandono y la orfandad, han tenido la oportunidad de vivir, conocer y disfrutar de lo que es una familia, conviviendo en amor y unidad, adquiriendo hábitos, estudiando y haciendo una vida en la que se han sentido amados y acogidos, con un sentido de pertenencia que aún al pasar de los años siguen teniendo en sus corazones, por la huella de amor y atención que ha dejado en sus vidas.

También REMAR ha sido un instrumento para que miles de hombres y mujeres en situaciones de indigencia a causa de adicciones y pobreza, hayan ingresado a los hogares de acogida, formando parte de las primeras y segundas fases, en las que conviven como una gran familia, aprendiendo una nueva forma de vida con valores como el respeto, la tolerancia, la empatía, la dignidad y la responsabilidad.

REMAR acoge también a cientos de mujeres, madres con hijos, viudas, mujeres con problemas de violencia, maltratadas y obligadas a dejar su hogar huyendo del dolor y la angustia, siendo acogidas en hogares para mujeres, en donde han recibido amor, comprensión, atención en las necesidades de ellas y de sus hijos, convirtiéndose en amigas y hermanas que conviven diariamente y juntas van superando todas

aquellas situaciones difíciles que han vivido y miran el futuro con esperanza y seguridad.