REMAR, Pasión por las almas. ¡Contamos con tu ayuda!

¡Síguenos!

En tiempos difíciles, Remar continúa enviando contenedores.

Desde hace más de un año y medio el mundo entero está viviendo tiempos difíciles, nunca antes habíamos vivido una pandemia de estas dimensiones y sus consecuencias. Se habla de crisis económica, crisis de abastecimiento, y encarecimiento de los precios de productos básicos, así como de la luz. No son tiempos fáciles para muchos.

 

En Remar continuamos trabajando con esfuerzo y ánimo.

 

¡Gracias! a todos aquellos que lo hacen posible, trabajo de voluntarios y empresas colaboradoras.

Desde la sede central de Remar en Madrid, a finales de este mes de octubre se han cargado dos contenedores llenos de productos de primera necesidad como alimentos no perecederos, pañales, calzado, ropa y maquinaria.

 

Estos contenedores serán enviados a los países de Costa de Marfil y Benin, para dar impulso a la obra social que se viene realizando en estos países.

 

Dios es fiel, y hasta el día de hoy nos ha sostenido.

 

Remar Costa de Marfil

 

Desde 1995 REMAR Costa de Marfil ha conseguido atender a miles de niños necesitados o huérfanos, algunos por la miseria, otros por la guerra, cuidando y escolarizando a cientos de adolescentes de las calles con graves problemas para su reinserción social por delincuencia y drogadicción y ha realizado un trabajo de atención a presos dentro y fuera de las cárceles, llevando comida a los centros penitenciarios en los que muchos morían por verdadera inanición, y dando a muchos de ellos la posibilidad de aprender oficios en talleres ocupacionales dentro de los centros REMAR.

Remar Benin

Desde 2004 REMAR actúa en Benín atendiendo a niños huérfanos, madres solteras, hombres adictos al alcohol y abriendo comedores sociales en poblados extremadamente pobres.

“Hermanos, yo mismo no pretendo haberlo ya alcanzado; pero una cosa hago: olvidando ciertamente lo que queda atrás, y extendiéndome a lo que está delante, prosigo a la meta, al premio del supremo llamamiento de Dios en Cristo Jesús.” –  Filipenses 3:13-14