Descubre los desafíos que enfrentan las mujeres en relación con la salud mental y cómo REMAR brinda apoyo y esperanza a través de programas diseñados especialmente para ellas. Acompáñanos en este viaje de reflexión y aprendizaje.
La salud mental se ha convertido en un tema de creciente preocupación, especialmente entre las mujeres, en los últimos años. Según estudios hay un notable aumento en la prevalencia de enfermedades mentales, que ha afectado a personas de todas las edades, incluyendo niños, adolescentes y sus familias.
Las mujeres, debido a su sensibilidad y mayor susceptibilidad emocional, enfrentan riesgos específicos que pueden propiciar el desarrollo de trastornos mentales. La violencia, tanto en la infancia como en la adultez, el equilibrio entre responsabilidades del hogar y del trabajo, así como la presión social ejercida por los medios y las redes sociales, son algunos de los factores que contribuyen a esta situación.
Este artículo ofrece una mirada profunda a un tema de vital importancia. Acompáñanos en este viaje de reflexión y aprendizaje, y descubre cómo REMAR ofrece una puerta de ayuda a las mujeres que lo necesitan.

ENFERMEDADES MENTALES EN LA MUJER
Por Mónica Amarah
La prevalencia de enfermedades mentales ha aumentado notablemente, no solo en jóvenes sino también en mujeres desde el año 2020. Un informe de 2021 de la Fundación ANAR indica que las consultas relacionadas con salud mental aumentaron en un 54.6% respecto al año anterior, afectando a niños, adolescentes y sus familias.
Las mujeres, dada su sensibilidad y mayor susceptibilidad emocional, enfrentan riesgos específicos que pueden propiciar el desarrollo de trastornos mentales. La violencia es un factor crítico, especialmente la sufrida en la infancia y la adultez. El abuso sexual durante la niñez es particularmente devastador, y muchas víctimas, por vergüenza, no llegan a denunciar estos hechos. Las mujeres que han experimentado violencia sexual tienen un riesgo incrementado de desarrollar patologías mentales en su vida adulta.
Otro factor es la presión de equilibrar responsabilidades del hogar y del trabajo. Muchas mujeres enfrentan estas cargas solas debido a separaciones matrimoniales, falta de aporte económico del cónyuge, o desempleo masculino en el hogar. Además, muchas deben cuidar de familiares mayores sin los recursos necesarios para asistirlos en centros geriátricos, enfrentando listas de espera interminables y acceso limitado a servicios públicos.
La presión social ejercida por medios de comunicación y redes sociales también es significativa, promoviendo un estereotipo de mujer que cumple con exigencias y modelos impuestos socialmente. Esto puede ser especialmente abrumador para las mujeres más jóvenes. En muchos países, las mujeres continúan siendo objeto de maltrato, violencia y denigración, a menudo subyugadas por sus parejas.
Desde una Perspectiva Cristiana
Según la narrativa cristiana, la mujer ha sido históricamente el objetivo principal de ataques espirituales, tal como se menciona en Génesis 3:15, donde se habla de la enemistad perpetua entre la mujer y Satanás.
En la historia, las beguinas, un grupo de mujeres cristianas del siglo XII en los países bajos, optaron por vivir juntas en devoción a Dios y al servicio de los necesitados, apartadas de las estructuras de una Iglesia Católica que percibían como corrupta y desatenta a los derechos femeninos.
En el cristianismo contemporáneo, se enfatiza la restitución integral de la mujer —espíritu, alma y cuerpo—, invitándolas a depositar sus ansiedades y cargas en Jesús, visto como un refugio eterno y una fuente de paz. Esta perspectiva proporciona un contexto de esperanza y apoyo espiritual que puede ser vital para muchas mujeres enfrentando desafíos en su bienestar mental y físico.
Siempre hay esperanza
A pesar de los desafíos que enfrentan las mujeres en relación con la salud mental, hay un hilo de esperanza que atraviesa estas dificultades. A lo largo de la historia y en la actualidad, se han destacado ejemplos de resiliencia y fortaleza femenina que ofrecen luz en medio de la oscuridad.
Las mujeres han demostrado una notable capacidad para sobreponerse a las adversidades, encontrando fuerza en la fe en Dios y en el apoyo mutuo. Jesús es un refugio eterno y una fuente de paz, donde las mujeres pueden depositar sus cargas y encontrar alivio para sus angustias. Esta visión proporciona un contexto de esperanza y apoyo espiritual que puede fortalecer a las mujeres en su búsqueda de bienestar mental y emocional.

¿NECESITAS AYUDA?
La ONG REMAR ofrece programas de ayuda, atención y apoyo especialmente diseñados para mujeres, donde puedes encontrar un hogar de refugio, un lugar donde recibirás el apoyo y la orientación que necesitas.
Si estás pasando por situaciones difíciles, ya sea violencia, abuso, dificultades económicas o cualquier otro problema, no estás sola. En REMAR, te ofrecemos un ambiente seguro donde puedes reconstruir tu vida y encontrar esperanza para el futuro.
¡No dudes en contactarnos!