Los voluntarios de Remar SOS Turquía llevan ya dos meses y medio trabajando en la región de Hatay, después de los terremotos ocurridos en febrero, y nos informan de la situación actual. Queda mucho trabajo por delante.
El ambiente en muchos casos se vuelve tenso, vemos crisis de ansiedad y ataques de pánico entre la población, mucha incertidumbre y personas con mucha necesidad.
Grecia, una doctora guatemalteca voluntaria con Remar SOS en la región nos cuenta el siguiente testimonio: ¨La situación es devastadora. Se están quitando los escombros de los edificios caídos y dañados en el terremoto, y poco a poco se van viendo calles limpias con muchos espacios vacíos, lo que está provocando mucha ansiedad entre la población, al encarar la realidad de que lo han perdido todo, sus hogares, sus pertenencias o recuerdos familiares.
La gente está temerosa de quedarse sin comida y manifiestan mucha frustración. En ocasiones incluso cuando se les reparten alimentos o ayuda vemos escenas de crispación. Es porque la situación de crisis se alarga, eso hace que la gente se ponga nerviosa, incluso violenta, debido al mismo estado de desesperación que están viviendo, producto de la crisis.
En estos momentos estamos acudiendo con la ambulancia a villas y localidades pequeñas de la región. Se atiende a personas que han quedado con secuelas de los traumatismos sufridos en el terremoto, hay muchas emergencias médicas. Se ofrece asistencia sanitaria, repartimos cajas de alimentos y productos de primera necesidad.
También estamos comenzando a realizar actividades para niños, porque nos parece muy importante, ya que algunos no han podido retomar el ir al colegio, hacemos diferentes dinámicas con ellos.
Estamos trabajando mucho en el área emocional y espiritual, las personas están muy necesitadas de palabras de aliento y esperanza, hay mucha desesperación. Compartimos el evangelio y las personas están muy receptivas, escuchan con mucho entusiasmo y necesidad, vemos vidas transformadas.
Estamos colocando tiendas de campaña para que puedan vivir las familias que lo han perdido todo, y el siguiente proyecto es poder habilitar contenedores y casas prefabricadas, para que puedan vivir en condiciones más dignas.
“Yo les he dicho estas cosas para que en mí hallen paz. En este mundo afrontarán aflicciones, pero ¡anímense! Yo he vencido al mundo.”- Juan 16:33