En Remar Panamá iniciamos nuestro trabajo en el año 1996, atendiendo a personas que enfrentaban graves problemas de adiccioones a drogas y alcohol.
También centramos nuestros esfuerzos en la restauración familiar y en la ayuda a personas en situación de calle, así como en la apertura de hogares para ancianos desamparados y en la atención a mujeres y madres con graves problemas de riesgo social, abandono y maltrato, sin posibilidades económicas ni preparación en oficios.
Pero desde entonces la obra social de Remar Panamá se ha desarrollado y evolucionado mucho, gracias a Dios primero, y también al esfuerzo de voluntarios y donaciones de empresas, se han abierto hogares para la rehabilitación y restauración de personas, y se han implementado talleres de aprendizaje y talleres ocupacionales que funcionan como pequeñas empresas para ayudar al sostenimiento de la obra.